La histerectomía es una de las operaciones mayores más comunes, con 72 362 procedimientos realizados en Inglaterra en 1993. Sin embargo, para las mujeres con hemorragia uterina disfuncional se han desarrollado otras opciones quirúrgicas menos invasivas. En particular, la ablación endometrial histeroscópica ha demostrado ser una terapia eficaz. Los ensayos prospectivos aleatorios han demostrado que la cirugía histeroscópica se asocia con un tiempo de operación más corto, menos complicaciones, menos necesidad de analgésicos, una reanudación más rápida de las actividades normales y del trabajo y un ahorro en los costes del tratamiento. El funcionamiento psicológico y social también mejora sin diferencias significativas en comparación con la histerectomía. Sin embargo, existe una tendencia a que las mujeres asignadas al azar a la histerectomía informen de mayores índices de satisfacción.
Actualmente se están desarrollando y probando varias técnicas ablativas no histeroscópicas. Aunque resultan atractivas, ya que no requieren habilidades histeroscópicas significativas y probablemente demostrarán tener menos riesgos operativos que los procedimientos histeroscópicos, los resultados de estos procedimientos están todavía en fase de evaluación.