Autumn de Forest tenía 4 años cuando trajo a casa un proyecto de arte de preescolar, una acuarela que llamó «Elefante». Era abstracta, con pinceladas pronunciadas. Sus padres lo encontraron sorprendentemente artístico, pero pensaron que era una casualidad. Durante los meses siguientes, Autumn creó más y más obras de arte. Sus padres, Doug y Katherine, empezaron a conservar cuidadosamente sus obras porque pensaban que sería divertido para ella tener los cuadros cuando fuera mayor.
Los padres de Autumn empezaron a comprarle pinturas y lienzos de calidad de museo «sólo para ver qué pasaba». Sus cuadros empezaron a ser cada vez más grandes, y ahora suelen tener un tamaño de 4 por 6 pies. Su padre tuvo que construirle una especie de puente de madera para sentarse y pintar en el centro del lienzo. Pinta unas horas al día en su casa de Las Vegas.
Autumn nunca ha recibido instrucción formal y hasta ahora su obra es el resultado de la intuición, la imaginación y la inspiración. El padre de Autumn es músico y su madre, actriz. También está emparentada con varios artistas de colección, como Lockwood de Forest (1850-1932), George de Forest (1855-1941) y Roy de Forest (1930-2007).
Autumn ha realizado giras por los medios de comunicación nacionales y ha sido entrevistada por Matt Lauer en el Today Show. Ha aparecido en Inside Edition, ABC, CBS, FOX y NBC News. Ha dado conferencias por todo el país para empresas internacionales, universidades, organizaciones benéficas y organizaciones de todo tipo. El Discovery Channel la presentó en un especial de niños prodigio y se refiere a ella como un genio artístico. Ocean Galleries presentó la primera exposición individual de Autumn con tan solo diez años, en agosto de 2012.
En 2015, Autumn fue invitada al Vaticano, donde recibió el prestigioso Premio Internacional Giuseppe Sciacca para las Artes y la Cultura, que se concede a unos pocos jóvenes seleccionados de todo el mundo que se cree que están cambiando el mundo para mejor. Durante su estancia, Autumn tuvo una audiencia privada con el Papa Francisco. Le regaló obras de arte realizadas por ella, inspiradas específicamente en la iconografía religiosa y gótica del Vaticano. Estas obras de arte residen ahora en la Colección Vaticana.