No importa la época del año, la exposición excesiva a la luz solar directa puede ser una mala noticia para su piel. Tomar el sol es estupendo para asegurarse de obtener suficiente vitamina D, pero intentar broncearse permaneciendo al sol siempre conlleva un peligro. En el Reino Unido puedes quemarte incluso en un día nublado, y las quemaduras solares aumentan el riesgo de cáncer de piel.
Siempre es mejor mantenerse a salvo bajo el sol y utilizar siempre protección solar o cubrirse. También es importante conocer los signos del cáncer de piel, para saber qué buscar y cuándo buscar atención médica.
Cómo detectar el cáncer de piel
Lo principal que hay que buscar en un posible cáncer de piel son los cambios en un lunar o una peca. Es bueno estar familiarizado con tu piel y con los lugares donde tienes lunares y pecas para estar atento a cualquier cambio. La indicación más común de melanoma es el desarrollo de un nuevo lunar o ver que un lunar existente cambia de aspecto.
La forma más fácil de recordar lo que hay que buscar es pensar en el ABCDE
A – asimetría
¿El lunar tiene una forma irregular? Un lunar normal crece de forma uniforme y simétrica, mientras que un melanoma será irregular y asimétrico.
B – borde
¿Es el borde del lunar desigual o irregular? Un lunar normal tiene un borde claramente definido y suave, mientras que un melanoma puede tener un aspecto más borroso y desigual.
C – color
Los melanomas suelen tener varias manchas de color diferentes, como el marrón, el negro o el rojo, mientras que un lunar normal suele tener un color uniforme.
D – diámetro
Un melanoma suele parecer más grande que un lunar normal, y puede ser mayor de 6 mm. Sin embargo, los lunares sanos pueden ser más grandes y los lunares cancerosos a veces pueden ser más pequeños.
E – elevación
Un melanoma normalmente se elevará por encima de la superficie de la piel a medida que crezca, así como posiblemente se inflamará a medida que se hinche.
¿Dónde se encuentran los melanomas con más frecuencia?
Los melanomas pueden aparecer en cualquier parte del cuerpo, pero normalmente se encuentran en las zonas más expuestas al sol. En el caso de las mujeres, las piernas son las más comunes, mientras que la zona más afectada en los hombres es la espalda.
Un melanoma puede empezar como parte de un lunar ya existente o puede surgir en una zona clara de la piel, así que asegúrate de estar atento a cualquier cambio en los lunares ya existentes, así como de buscar nuevas marcas.
Cómo reducir el riesgo de cáncer de piel
La mejor manera de reducir las posibilidades de desarrollar un melanoma es evitar las quemaduras solares. Utiliza siempre protección solar cuando pases largos periodos de tiempo al aire libre, como por ejemplo cuando trabajes en el jardín o practiques algún deporte, y especialmente cuando estés en la playa o junto a una piscina durante las vacaciones o el verano.
También debe vigilar su piel para detectar cualquier cambio en los lunares o pecas, ya que un diagnóstico precoz del cáncer de piel aumenta en gran medida las posibilidades de éxito del tratamiento.