No hay duda de que los fundamentos adecuados del swing y las técnicas del juego corto son partes importantes de un juego de golf consistente. Sin embargo, el buen golf no se basa únicamente en una mecánica perfecta, sino también en la estrategia. Afortunadamente, hay varias estrategias clave que cualquiera puede utilizar fácilmente para obtener puntuaciones más bajas. Y lo que es mejor, usar tu inteligencia es mucho más fácil que intentar crear un backswing o una posición de impacto fundamentalmente perfectos. En este sentido, el título de esta historia es cierto: se puede mejorar la puntuación sin cambiar el swing.
A continuación se presentan cinco técnicas no técnicas que puede emplear para lograr resultados más consistentes la próxima vez que pise el campo. Abarcan las áreas de selección de tiros y objetivos, la mecánica sin tensión, el tempo y el ritmo, la fortaleza mental y la toma de decisiones para salvar la puntuación (en lugar de salvar el orgullo). Si consigue dominar estos requisitos estratégicos, estará en camino de realizar una ronda decente incluso si su swing no está en plena forma. Y cuando lo esté, ¡cuidado!
Golpear a la parte gorda del green
Demasiados golfistas apuntan al pin sin considerar su ubicación en el green. Los mejores golfistas entienden la importancia de jugar según su habilidad y, por lo tanto, se lo piensan dos veces antes de disparar a un pin que está escondido cerca del borde del green. Esto puede no dejarles con una mejor oportunidad de birdie, pero ciertamente disminuye la posibilidad de bogey o algo peor.
Para tomar mejores decisiones sobre cuándo y cuándo no ir a por la bandera, divide tus palos en tres categorías: 1) ir a lo seguro, 2) proceder con precaución y 3) ir a por ello. Los palos de la categoría «ir a lo seguro» son las maderas de calle y los hierros largos. Para la mayoría de los golfistas, estos son los palos que presentan el mayor desafío cuando se trata de controlar la distancia y la dirección de forma consistente. Por lo tanto, cuando tenga un tiro al green que ponga en sus manos una madera de calle o un hierro largo, juegue siempre a lo seguro apuntando al centro del green. Proceda con precaución con los palos que están hacia la mitad del set (hierro 5 a hierro 8). Estos palos requieren una decisión por su parte basada en cómo está haciendo el swing en un día determinado. Si está haciendo un buen swing y se siente seguro, puede ser más agresivo si tiene un hierro medio en sus manos. Si está un poco apagado, adopte un enfoque más conservador y apunte a la parte gorda del green. La mayoría de los golfistas son más precisos con sus hierros cortos, que son los palos que van a por todas. Si tiene una distancia de wedge a la bandera, no tenga miedo en tomar una línea más agresiva a su objetivo.