Clive Burr, el exbaterista de Iron Maiden, murió anoche a los 56 años. Burr padecía esclerosis múltiple y murió mientras dormía.
«Esta es una noticia terriblemente triste», dijo el fundador y bajista de Maiden, Steve Harris, en el sitio oficial del grupo. «Clive era un viejo amigo de todos nosotros. Era una persona maravillosa y un baterista increíble que hizo una valiosa contribución a Maiden en los primeros días cuando estábamos empezando. Este es un día triste para todos en la banda y los que le rodean y nuestros pensamientos y condolencias están con su pareja Mimi y su familia en este momento.»
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Nacido el 8 de marzo de 1957 en East Ham, Londres, Burr fue miembro de otra prometedora banda de metal británica, Samson, antes de unirse a Maiden en 1979. Como uno de los líderes de la «Nueva Ola del Heavy Metal Británico» (que incluía a grupos como Def Leppard, Saxon y Diamond Head), Maiden mostró rápidamente un sonido que, desde el principio, fusionaba la energía del punk con la potencia del metal.
La batería de Burr resultó ser un ingrediente importante en los primeros clásicos de Maiden, como el debut autotitulado de 1980, Killers de 1981 y The Number of the Beast de 1982, y en himnos de headbanging como «Running Free», «Wrathchild» y «Run to the Hills». Sin embargo, durante esta primera época, los miembros de Maiden entraban y salían con frecuencia, y en diciembre de 1982, Burr había abandonado el grupo, justo cuando estaban a punto de convertirse en un cabeza de cartel mundial en los estadios.
Después de dejar Maiden, Burr apareció en grabaciones de grupos de metal como Trust, Stratus, Gogmagog, Elixir, Desperado (que incluía al cantante de Twisted Sister Dee Snider) y Praying Mantis. A Burr se le diagnosticó esclerosis múltiple, y sus antiguos compañeros de la banda Maiden acudieron en su ayuda realizando conciertos benéficos y ayudando a crear el Clive Burr MS Trust Fund. En los últimos años de su vida, Burr estuvo confinado a una silla de ruedas.
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«Conocí a Clive cuando dejaba Samson y se unía a Iron Maiden», añadió el cantante de Maiden, Bruce Dickinson, en la web del grupo. «Era un gran tipo y un hombre que realmente vivió su vida al máximo. Incluso durante los días más oscuros de su esclerosis múltiple, Clive nunca perdió su sentido del humor ni su irreverencia. Este es un día terriblemente triste y todos nuestros pensamientos están con Mimi y la familia».