Los clientes de comedia de Becky incluyen a Kevin Hart, Aziz Ansari y Amy Poehler. Otros clientes son Bill Burr, Natasha Lyonne y Hannibal Buress. Entre sus antiguos clientes se encuentran Louis C.K., Pamela Adlon, John Mulaney y Nasim Pedrad.
Becky es productor ejecutivo de Broad City debido a su representación de Poehler, así como productor ejecutivo de Making It, Better Things, Baskets, Insecure y Everybody Hates Chris. También fue productor ejecutivo de la serie de Netflix Master of None, cocreada por Ansari, y de numerosas producciones con el entonces cliente Louis C.K., incluidas las series de televisión de FX Louie (acreditada entre 2013 y 2015) y Better Things (cocreada por C.K. y Adlon) y los especiales de comedia Louis C.K.: Live At The Beacon Theater (estrenado en FX en 2012), Louis C.K.: Oh My God (2013, HBO), Louie C.K.: Live at the Comedy Store (2015, estrenado a través del sitio web de C.K.) y Louis C.K. 2017 (Netflix). Fue productor de la película de comedia de Sony de 2017 Rough Night.
Respecto a su estilo de dirección, Becky dijo en una entrevista de 2012 que elige a los clientes «en función de la fuerza de su voz original y de si esa voz me emociona». Además, afirmó que todos sus clientes más exitosos compartían ciertas cualidades, diciendo que «son buenos trabajadores y dedicados, por dentro y por fuera».
PremiosEditar
Becky tiene nueve nominaciones a los Emmy como productor ejecutivo: dos por Master of None (2016 y 2017), y siete por proyectos con Louis C.K. (2012-2017).
Becky ha compartido dos premios Peabody: en 2012, con seis compañeros del elenco y el equipo de Louie y en 2016 con otros 14 miembros del elenco y el equipo de Better Things.
Escándalo de Louis C.K.Editar
En noviembre de 2017, el cómico y cliente de Becky, Louis C.K., fue acusado por cinco mujeres de conducta sexual inapropiada en un reportaje de The New York Times, acusaciones que C.K. confirmó posteriormente. En la historia inicial del Times, las comediantes Dana Min Goodman y Julia Wolov acusaron a Becky de decirles, a través de sus gerentes, que no hablaran sobre su experiencia de C.K. exponiéndose y masturbándose frente a ellas después de un espectáculo en 2002; dada la influencia de Becky en la comedia, las comediantes que entonces estaban en el inicio de su carrera temían represalias profesionales. Posteriormente, 3 Arts Entertainment prescindió de C.K. como cliente y Becky emitió un comunicado en el que se disculpaba «por no haber escuchado y no haber entendido lo que les ocurrió a Dana y Julia», afirmando que inicialmente había percibido algunas de las acusaciones de acoso como una «cuestión de infidelidad» y no como una mala conducta sexual. Publicaciones como Paste y Splitsider pidieron el despido de Becky de 3 Arts Entertainment. Bill Burr, cliente de Becky, le apoyó, llamando a Becky «una de las grandes personas que he conocido en este negocio». Pamela Adlon, hasta entonces cliente de Becky, rompió sus lazos con él y con 3 Arts tras el escándalo.
En la disculpa de C.K. por los incidentes, lamentó «que esto haya atraído la atención negativa hacia mi mánager Dave Becky, que sólo trató de mediar en una situación que yo causé».