Desastre en la presa de Brumadinho

VíctimasEditar

El 26 de enero de 2019, el presidente de Vale, Fabio Schvartsman, declaró que la mayoría de las víctimas son empleados de Vale. Tres locomotoras y 132 vagones quedaron sepultados y cuatro ferroviarios están desaparecidos. El lodo destruyó dos tramos de puente ferroviario y unos 100 metros de vía férrea. En enero de 2020 se confirmó la muerte de 259 personas y se consideró que 11 estaban desaparecidas. Las cifras se modificaron posteriormente a 270 muertos.

Medio ambienteEditar

Puente ferroviario de mineral de hierro destruido por la corriente de lodo, 3 kilómetros (1,9 mi) aguas abajo de la presa colapsada

La ruptura de la presa liberó alrededor de 12 millones de metros cúbicos de relaves. Según los expertos, los metales de los residuos probablemente se incorporarán al suelo del río y podrían llegar a afectar a todo el ecosistema de la región. Según los ecologistas, el flujo de residuos también podría llegar al río São Francisco que -además de Minas Gerais- pasa por otros cuatro estados brasileños y por las presas de dos centrales hidroeléctricas: Retiro Baixo y Três Marias.

La Agencia Nacional del Agua (ANA) afirmó que los residuos podrían contaminar más de 300 kilómetros de río. El presidente de Vale, Fabio Schvartsman, dijo que la presa estaba inactiva desde 2015 y que el material no debería moverse demasiado. «Creo que el riesgo ambiental, en este caso, será mucho menor que el de Mariana», dijo.

Impacto económicoEditar

Como consecuencia del desastre, el 28 de enero la cotización de Vale S.A. cayó un 24%, perdiendo 71.300 millones de reales (19.000 millones de dólares) de capitalización bursátil, la mayor pérdida en un solo día en la historia de la bolsa brasileña, superando la de mayo de 2018, cuando Petrobrás perdió más de 47.000 millones de reales de valor de mercado. A finales del 28 de enero, la deuda de Vale fue degradada a una calificación de BBB- por Fitch Ratings.

En la ciudad de Brumadinho, muchas áreas agrícolas fueron afectadas o totalmente destruidas. La industria ganadera local sufrió daños, principalmente por la pérdida de animales como el ganado y las aves de corral. El mercado local también fue impactado debido a los daños, con algunas tiendas y establecimientos que permanecieron cerrados durante algunos días.

ReaccionesEditar

El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, envió a tres ministros para acompañar las labores de rescate. El gobernador de Minas Gerais, Romeu Zema, anunció la formación de un grupo de trabajo para rescatar a las víctimas con decenas de bomberos reasignados a Brumadinho.

En señal de solidaridad con el gobierno brasileño, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, envió a Brumadinho un grupo de búsqueda y rescate de 130 especialistas de defensa civil y buzos de la marina para ayudar a los especialistas brasileños a encontrar posibles sobrevivientes.

El 29 de enero, las autoridades brasileñas emitieron órdenes de arresto contra cinco empleados que se cree que están relacionados con el colapso de la presa, lo que llevó a la detención de dos altos directivos de la mina y otro empleado de Vale, junto con dos ingenieros de la empresa alemana TÜV Süd que habían sido contratados para inspeccionar la presa.

El tesorero del sindicato minero local calificó el desastre de «premeditado», ya que había continuas y antiguas quejas y advertencias sobre la integridad estructural de la presa. Vale negó estas acusaciones y afirmó que la mina estaba al día con las últimas normas.

Un día después de la falla, el Instituto Brasileño de Medio Ambiente y Recursos Naturales Renovables anunció una multa de 250 millones de reales a la empresa Vale.

Las autoridades judiciales brasileñas congelaron 3.000 millones de dólares de los activos de Vale, diciendo que se embargarían bienes inmuebles y vehículos si la empresa no podía reunir el dinero.

En abril, los inspectores de seguridad de Vale se negaron a garantizar la estabilidad de al menos 18 de sus presas y diques en Brasil.

Los fiscales brasileños anunciaron, el 21 de enero de 2020, que Vale SA, el auditor TÜV Süd y 16 individuos serían acusados. En enero de 2021, un grupo de demandantes brasileños presentó la primera demanda civil en suelo alemán contra TÜV Süd.

Una base de datos global de instalaciones de almacenamiento de relaves mineros y divulgaciones asociadas fue anunciada por GRID-Arendal a través del apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente La base de datos permite a los usuarios examinar las divulgaciones de información sobre presas de relaves por ubicación, empresa, tipo de presa, altura, volumen y riesgo, entre otros factores.

En febrero de 2021, el gobierno estatal llegó a un acuerdo con Vale para reparar todos los daños medioambientales y pagar a las familias de las personas fallecidas 7.000 millones de dólares en concepto de indemnización.

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