A los 16 años, era el mejor vendedor del mundo.
O así me hacía sentir mi padre cuando hablaba con los clientes de su tienda de telefonía sobre las ventajas de teléfonos como el Siemens C60 frente al Nokia 3595. Pero desde que me pasé a usar un dispositivo de Apple, a partir del iPhone 4S en 2011, no he sentido la necesidad de estar al día con lo que ofrecen otros teléfonos. Estaba claro que, por el sobreprecio que pagaba, Apple producía los malditos mejores teléfonos del mercado.
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Eso ya no es cierto.
En el año en que Apple lanzó el esperado iPhone X, el periodista tecnológico de Quartz Mike Murphy declaró que los teléfonos insignia de Samsung eran los mejores smartphones de 2017. Así que cuando llegó el momento de comprar un nuevo teléfono, la elección principal no era entre un iPhone 8 Plus y un iPhone X. En cambio, me enfrentaba a una pregunta mucho más grande: ¿Es hora de renunciar a iOS y elegir Android en su lugar?
Pasé una semana sopesando mis opciones y probando diferentes smartphones. Al final, el Samsung Galaxy S9+ parecía no tener competencia en todas las cosas que quería: es rápido, sigue teniendo un botón de inicio, una toma de auriculares, un escáner de huellas dactilares… junto con una cámara increíble, reconocimiento facial y la mejor pantalla de smartphone del mundo. Murphy dice que el teléfono es «casi perfecto».
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Dos semanas después, antiguo fanboy de Apple durante años, me he convertido a Android. El cambio fue mucho más fácil de lo que imaginaba, y quizás algunas de las preguntas que tuve que responder por mí mismo puedan ayudarte a saltar del barco cuando llegue el momento de una actualización.
¿Vale la pena pagar por iOS?
Apple parece haber perdido su competitividad en el precio. Hubo un tiempo en el que pagar más por un iPhone significaba obtener un teléfono con mejor calidad de construcción, capacidades de cámara y una pantalla magnífica. No podía competir con el ruidoso mercado de Android en cuanto al número de funciones y la personalización que ofrecía. Pero no importaba porque el paquete de Apple en general proporcionaba más valor.
Esa exitosa fórmula se ha roto en los últimos años, y para mí el iPhone X de 1.000 dólares fue el clavo en el ataúd. En el Samsung S9+, el Google Pixel 2 XL o el OnePlus 5T, tenía teléfonos que tenían todo lo que hacía un iPhone X -y más- a un coste mucho menor. De hecho, al precio de venta actual, puedes comprar dos OnePlus 5T por el coste de un iPhone X. Y, como dice el crítico estrella de YouTube Lewis Hilsenteger, «no hay manera de que el iPhone X sea el doble de bueno que el OnePlus 5T».»
¿No es difícil pasar de iOS a Android?
Mi mayor temor era que iba a odiar usar un teléfono Android. Llevaba tanto tiempo en el universo iOS con un MacBook, un iPad y un iPhone que pensaba que acostumbrarme a Android sería una pesadilla. Como vendedor adolescente de teléfonos móviles, mi mejor cualidad era que era capaz de recordar cómo navegar por cada uno de los diferentes sistemas operativos de los teléfonos de la época: Nokia, Siemens, Motorola y Sony Ericsson (¿recuerdas?). Pero como adulto sin conocimientos de sistemas operativos fuera de iOS, estaba realmente preocupado.
Por suerte, mi colega Murphy pudo prestarme un Android para que lo probara durante un par de días. En pocas horas mis temores se disiparon. Había subestimado la utilidad de las búsquedas en los smartphones. Y no es de extrañar que Android, impulsado por Google, haga un mejor trabajo de integración de la búsqueda en su usabilidad que el iOS de Apple. No hay ningún ajuste que no pueda encontrar utilizando el cuadro de búsqueda, y me facilitó mucho la vida mientras me adaptaba al uso de Android. No todo el mundo tiene la suerte de poder probar fácilmente un teléfono antes de comprarlo, pero la mayoría de los lugares ofrecen políticas de devolución útiles en caso de que simplemente no puedas lidiar con el uso de un sistema operativo diferente.
¿Qué pasa con el traslado de datos, fotos y contactos de iOS a Android?
Transferir datos de iOS a Android es sencillo. En cuanto empieces a configurar tu teléfono Android, te guiará a través de sencillos pasos para mover fotos, historial del navegador, mensajes SMS, contactos y otros archivos de tu iPhone. Lo que no podrás portar es iMessage, y eso podría ser un gran problema para los usuarios avanzados. Si aún así decides pasarte a Android, deberías ir a esta configuración y desactivar que tu número de teléfono esté asociado a iMessage. De esta forma deberías seguir recibiendo los mensajes de tus amigos en forma de SMS y no en iMessage.
¿No es iOS una mejor experiencia de usuario?
Como fanboy de Apple, una de las afirmaciones que hacía era que iOS tenía una mejor experiencia de usuario que su competencia. Hasta cierto punto es cierto, ya que Apple ha mantenido un estrecho control sobre el sistema operativo. Eso le ha permitido crear un sistema que se siente uniforme y más refinado.
La experiencia de Android puede sentirse dispersa, especialmente si lo usas en dispositivos hechos por múltiples fabricantes. Por ejemplo, el Samsung S9+ tiene su botón trasero en la parte inferior derecha de la pantalla, mientras que el Google Pixel 2 XL lo tiene en la parte inferior izquierda. Pero la gracia salvadora de Android es su increíble cantidad de flexibilidad. Por ejemplo, después de usar el S9+ durante un solo día, cambié el lanzador -el sistema que gobierna tu pantalla de inicio y el acceso a las aplicaciones del teléfono- de la configuración por defecto de Samsung a uno llamado Evie, y mejoró mucho mi experiencia con el sistema operativo.
Dicho esto, los usuarios de hoy en día pasan la mayor parte de su tiempo en aplicaciones que no están diseñadas ni por Apple, ni por Google, ni por ninguno de los fabricantes de dispositivos. Así que su experiencia de la misma app a través del sistema operativo tiende a ser la misma. Para la mayoría de los usuarios, los sistemas operativos no deberían suponer una gran diferencia hoy en día. (No hay garantías de que todas tus aplicaciones de terceros funcionen bien. Murphy dice que la interfaz de la aplicación de Twitter difiere en función del sistema operativo.)
¿Qué pasa con todas las aplicaciones compradas en iOS?
Esto puede ser una preocupación mayor para otros. He sumado la cantidad de dinero que he pagado por las aplicaciones de iOS y el total sólo ascendió a unas 70 libras (100 dólares) a lo largo de siete años. Por suerte, la mayoría de las apps de pago eran juegos que probablemente no iba a utilizar en el futuro.
Al comprar un Samsung S9+ en lugar de un iPhone X, ya había ahorrado más dinero del que había pagado por las apps de iOS. Y lo que es mejor, como el S9+ tiene clavija para auriculares, puedo seguir usando mis auriculares Bose con cancelación de ruido, lo que me ahorra unos 299 dólares que habría desembolsado por la versión Bluetooth, o tener que trastear con adaptadores.
¿Qué echas de menos de iOS?
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La posibilidad de desplazarse a la parte superior de una página con un simple toque en la parte superior.
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Llamadas por wifi. En el Reino Unido, mi proveedor de telefonía móvil Three me permitía utilizar el wifi para hacer y recibir llamadas cuando no tenía señal de móvil. Three me dijo que los iPhones tienen un software incorporado para habilitar la función. En mi Samsung, que no compré a Three, necesito una aplicación independiente para utilizar esa función. Y esa aplicación tiene que ejecutarse en segundo plano todo el tiempo para que la función funcione.
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Me gusta mucho San Francisco, el tipo de letra que utiliza Apple en su sistema operativo.
¿Qué no echo de menos de iOS?
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La pestaña de notificaciones en iOS es un desastre. En Android, las notificaciones de las diferentes aplicaciones están apiladas y puedes ampliar fácilmente las que quieres mirar.
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La falta de personalización.
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No hay ranuras para tarjetas de memoria externas.
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Siri.
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