Objetivo: En el sistema nervioso central de cordados y vertebrados, los tractos nerviosos sensoriales y motores se cruzan de un lado a otro al conectar el cerebro con los receptores sensoriales y las neuronas motoras. Estas «decusaciones», cruces en forma de X, relacionan cada lado del cerebro con el lado opuesto del cuerpo. Los protocordados derivan de un ancestro invertebrado, pero esta disposición contralateral no se da en ningún filo invertebrado. No se ha establecido ningún beneficio adaptativo de la decusación. ¿Qué podría explicar la evolución de la decusación?
Método: Una breve revisión de las características relevantes de la morfología comparada de invertebrados, cordados y vertebrados conduce a un modelo explicativo de la decusación.
Resultado: Un «modelo de giro somático» de la transición entre invertebrados y vertebrados explica las decusaciones como subproductos de un cambio más trascendental; la reubicación del neuraxis desde el aspecto ventral al dorsal del cuerpo. Se presentan pruebas de que esta inversión se produjo mediante un giro del cuerpo de 180 grados sobre su eje, justo detrás de su polo anterior. Esta rotación alineó el neuraxis con los ganglios dorsales de la cabeza y el cerebro y al retorcer los tractos nerviosos trajo consigo la decusación.
Conclusión: La decusación evolucionó como subproducto de una inversión parcial del plan corporal determinada genéticamente, que dio lugar a una rotación de 180 grados posterior al cerebro y la orofaringe.