«Pintada de azul, de adentro hacia afuera, parece albergar un poco de cielo. Es la típica casa de la tranquilidad pueblerina donde la buena comida y el sueño dan la energía suficiente para vivir sin mayores problemas y morir tranquilamente…».
Carlos Pellicer
La Casa Azul es el Universo Íntimo de Frida Kahlo. En esta hermosa residencia, la artista vivió la mayor parte de su vida; inicialmente con su familia y años después, con Diego Rivera. Asimismo, interesantes visitantes mexicanos y extranjeros se hospedaron en este lugar, atraídos por la cautivadora pareja de artistas.
Frida quiso dejar su casa como museo, para que la disfrutara su querido México. Por ello, después de su muerte, Diego organizó aquí, el Museo Frida Kahlo.
La museografía fue tarea del museógrafo, maestro y gran poeta Carlos Pellicer, muy amigo de la pareja. La administración del Museo fue encomendada al Fideicomiso del Museo Diego Rivera y Frida Kahlo del Banco de México, creado por el propio Rivera en 1957.
Desde la inauguración del Museo en julio de 1958, la Casa Azul exhibe el ambiente que inspiró a Frida para su creación, así como sus objetos personales. Junto a las pinturas de ambas artistas, se exponen notables piezas de arte popular, esculturas precolombinas, fotografías, documentos, libros y muebles. El hermoso jardín es parte esencial de la Casa Azul y permite acceder a la exhibición de los Vestidos de Frida.
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Archivo Diego Kahlo &Banco de México, Fiduciario en el Fideicomiso del Museo Diego Rivera y Frida Kahlo