Una buena nutrición es esencial para la supervivencia, el crecimiento físico, el desarrollo mental, el rendimiento, la productividad, la salud y el bienestar a lo largo de toda la vida: desde las primeras etapas del desarrollo fetal, en el momento del nacimiento, y a lo largo de la infancia, la niñez, la adolescencia y hasta la edad adulta.
Alimentación y nutrición del lactante y del niño pequeño
La lactancia materna y la alimentación complementaria son un aspecto fundamental del cuidado de los lactantes y los niños pequeños. Las prácticas de alimentación adecuadas estimulan el vínculo con el cuidador y el desarrollo psicosocial. Conducen a una mejor nutrición y crecimiento físico, a una menor susceptibilidad a las enfermedades comunes de la infancia y a una mayor resistencia para afrontarlas. La mejora de los resultados de salud en los niños pequeños tiene efectos sanitarios duraderos a lo largo de toda la vida, como el aumento del rendimiento y la productividad, y la reducción del riesgo de ciertas enfermedades no transmisibles.
El Departamento de Salud de la Madre, el Recién Nacido, el Niño y el Adolescente (MCA) realiza importantes inversiones en la promoción y la mejora de la alimentación del lactante y el niño pequeño. La Estrategia Mundial para la Alimentación del Lactante y del Niño Pequeño (véase más abajo) proporciona un marco para los esfuerzos del Departamento, incluyendo la producción de información técnica, el desarrollo de recomendaciones de alimentación, el apoyo a la investigación y el diseño de materiales de formación.
Nuestro trabajo se centra en las siguientes áreas clave:
- Estrategia mundial para la alimentación del lactante y del niño pequeño
- Lactancia materna
- Alimentación complementaria
- Alimentación en circunstancias excepcionalmente difíciles
- VIH y alimentación del lactante
- Malnutrición
Enlaces relacionados
- Alimentación del lactante y del niño pequeño – herramientas y materiales