Si miras la ciudad, digamos desde lo alto de un edificio, verás a la gente ir y venir. Cada una de ellas intenta ganarse la vida y, si lo piensas, los humanos no somos completamente diferentes de las hormigas y su ciclo de vida. Si nos fijamos bien, ¿qué puede enseñarnos el comportamiento de las hormigas?
¿Qué puede enseñarnos el comportamiento de las hormigas?
Las hormigas son organismos activos y energéticos que son capaces de adaptarse, realizar tareas complejas y trabajar juntas en función de sus interacciones con el entorno y sus compañeros de nido. Las hormigas, en concreto las tejedoras, también defienden sin miedo sus nidos de los depredadores, incluso de los que son 100 veces más grandes que ellas.
¿Qué son las hormigas?
Se dice que las hormigas evolucionaron a partir de ancestros parecidos a las avispas a mediados del período cretáceo (hace 110-130 millones de años).
Existen unas 22.000 especies de hormigas. Se consideran insectos sociales y miden entre 0,75 y 52 mm. Tienen seis patas que pueden levantar unas 20 veces su peso.
Las hormigas varían de color pero en su mayoría son rojas o negras. Son activas durante todo el año y forman colonias.
Según un artículo escrito por el Dr. Sudhakar Kokate publicado en www.researchgate.net, aparte de su papel como grandes volteadores de tierra y polinizadores, y como componente de la cadena alimentaria, los huevos de hormiga se utilizan como ingrediente de los escamoles mexicanos, mientras que las larvas de huevo de hormiga tejedora se utilizan en la ensalada tailandesa yam khai.
¿Qué podemos aprender de las hormigas?
Aquí hay algunas características de las hormigas, y lo que podemos aprender de ellas:
- Las hormigas tienen su propio sistema de comunicación
Aunque las hormigas parecen algo organizadas, las colonias de hormigas no son operadas por un líder o dirección.
¿Entonces cómo funcionan las colonias de hormigas?
Las colonias de hormigas funcionan mediante redes descentralizadas o, para decirlo de forma más sencilla, a través de interacciones locales para mantener la supervivencia de su colonia.
Algunos creen que a cada hormiga se le asigna una tarea para ayudar a la colonia, pero la investigación sobre el comportamiento de las hormigas realizada por Deborah Gordon en www.stanford.edu refuta esta afirmación. Según los biólogos de hormigas, las hormigas pasan de una tarea a otra.
¿Pero cómo elige una hormiga la tarea y cuándo hacerla? Y ¿cómo se comunican las hormigas con otras hormigas para encontrar comida?
Como he mencionado antes, las hormigas no dependen de su reina ni de ninguna autoridad. A la hora de elegir qué tarea realizar y cuándo hacerla, las hormigas se basan en gran medida en el entorno que las rodea, especialmente en el olor que las rodea, así como en sus interacciones con otras hormigas.
Para las hormigas cosechadoras, el roce de sus antenas es un factor decisivo para decidir qué tareas van a realizar.
Se dice que su olor cambia dependiendo de las tareas en las que estén trabajando en ese momento.
Por ejemplo, si hay mucha comida las hormigas recolectoras harán viajes rápidos desde la fuente de alimento hasta el nido, por lo que la interacción entre las hormigas patrulleras y las recolectoras será mucha. Sin embargo, si el alimento es escaso, el regreso de las hormigas recolectoras será lento y su interacción con las hormigas patrulleras será escasa. Debido a esto, las hormigas patrulleras sabrán que la comida es escasa y algunas de ellas saldrán a ayudar a encontrar comida.
De manera similar, a medida que la población de personas aumenta, y nos volvemos más concurridos, dependemos más de las interacciones tipo hormiga, como los mensajes de texto, el correo electrónico, etc. No sólo existen estas interacciones tipo hormiga en las telecomunicaciones, sino también en la robótica y la publicidad.
La diferencia, sin embargo, es que a los humanos nos importa el contenido de los mensajes de texto y del correo electrónico, pero a las hormigas sólo les importa la interacción.
En definitiva, las hormigas nos enseñan cómo puede sobrevivir un sistema sin un control central. En concreto, cómo el ritmo de las interacciones locales crea patrones en el comportamiento y el desarrollo de un grupo mayor, como las colonias.
2. Las hormigas pueden adaptarse
Usando su propio sistema de comunicación, las hormigas pueden adaptarse dependiendo de la necesidad de la colonia. Tal es la situación en la que los patrulleros se convirtieron en recolectores de alimentos cuando la comida que entregaban los recolectores era escasa.
3. Las hormigas realizan tareas colectivamente con disciplina
Como resultado de las interacciones locales, las hormigas realizan tareas como la recolección, el procesamiento, la distribución de recursos y la búsqueda, construcción y defensa de los nidos de las colonias.
Para ahorrar tiempo, los forrajeadores son reclutados desde el rastro en lugar de desde el nido para ahorrar más tiempo.
Cuando hay que hacer algo, las hormigas definitivamente participan en las actividades sin ninguna excusa a diferencia de los humanos. Además, una tarea compleja como la construcción de nidos parece más fácil cuando las hormigas cooperan entre sí basándose en lo que perciben a su alrededor.
4. Las hormigas tejedoras atacan a los intrusos sin miedo
¿Cómo se comportan las hormigas cuando están en peligro?
Las hormigas tejedoras no tienen miedo. Atacan a los intrusos aunque sean 100 veces más grandes en comparación con ellas.
Debido a este comportamiento, las hormigas tejedoras suelen utilizarse para controlar las plagas en los árboles frutales, como los de mango.
Las enemigas número uno de las hormigas son también las hormigas, concretamente otras colonias. Las hormigas hacen la guerra a otras colonias, ya que compiten por los recursos, como afirma https://askabiologist.asu.edu/explore/secrets-superorganism. Las hormigas también son extremadamente leales a sus colonias, de tal manera que luchan como un único superorganismo, como afirma John Naish en su artículo aquí https://www.dailymail.co.uk/sciencetech/article-4723528/What-humble-mighty-ant-teach-humans.html.
Para tener una comprensión del comportamiento de las hormigas, vea estos vídeos:
5. Las hormigas son muy activas y enérgicas
Cuando se ven hormigas, siempre están en un frenesí de actividad como correr arriba y abajo de la colina para recoger comida y otros recursos para sus nidos.
Si los humanos imitan este tipo de comportamiento, seguro que se agotan.
6. Las hormigas pueden construir grandes nidos porque trabajan juntas
Además de la disciplina, los humanos pueden aprender un par de cosas sobre el trabajo en equipo de las hormigas.
Las hormigas son capaces de hacer grandes nidos al cabo de un par de días porque trabajan juntas desde el amanecer hasta el atardecer.
Las obreras grandes son las que juntan las hojas y las mantienen en la misma posición, mientras que las demás cosen las hojas desde el interior. Utilizan las larvas que producen seda para coser las hojas.
Además de construir los nidos, las hormigas también reparan los daños de sus nidos si es necesario.
Pero, ¿por qué las hormigas trabajan juntas?
Como he mencionado antes, las obreras de las hormigas no son mandadas por la reina. En cambio, las obreras deciden individualmente en qué tarea trabajar en función de lo que perciben a su alrededor, de las interacciones con otras hormigas del nido y del entorno.
¿Qué nos puede enseñar el comportamiento de las hormigas? – Conclusión
Puede parecer que las hormigas sólo son una molestia, pero si observamos detenidamente su comportamiento, los humanos podemos aprender mucho de ellas. Los científicos están asombrados de cómo las hormigas obreras hacen su trabajo, no porque sean mandadas por sus reinas, sino por sus interacciones con el entorno y con sus compañeras de nido. En general, los humanos podemos aprender sobre el comportamiento adaptativo de las hormigas y su capacidad para realizar tareas complejas trabajando juntas.