¿Qué son los rayos X del brazo?
Los rayos X son una prueba de imagen común que utiliza pequeñas cantidades de radiación electromagnética de alta energía para producir imágenes para que los médicos vean el interior del cuerpo. El nivel de exposición se considera seguro para los adultos. No se considera seguro para un feto en desarrollo, por lo que es muy importante que una paciente embarazada informe a su médico de su embarazo antes de hacerse una radiografía.
Los rayos X atraviesan la piel y los tejidos blandos en su mayoría, pero no atraviesan los huesos o el metal con facilidad. Como los diferentes tejidos del cuerpo absorben diferentes cantidades de radiación, las imágenes mostrarán diferentes tonos de blanco y negro.
Uno de los usos más comunes de una radiografía es comprobar si hay huesos rotos después de un accidente, pero también se utilizan en muchas otras circunstancias.
Los rayos X se utilizan para identificar, diagnosticar y tratar muchos tipos de afecciones médicas. Es un elemento clave y, a menudo, el primero que se realiza en el proceso de diagnóstico.
Una radiografía del brazo es una prueba segura e indolora que utiliza una pequeña cantidad de radiación para tomar una imagen del brazo del paciente.
Razones para una radiografía del brazo:
Las radiografías se utilizan por multitud de razones. Un médico puede solicitar una radiografía para comprobar la existencia de ciertos cánceres en diferentes partes del cuerpo, detectando tumores anormales, crecimientos o bultos.
Una radiografía del brazo se utiliza para ver la zona del cuerpo en la que un paciente experimenta dolor, hinchazón u otras anomalías que requieren una visión interna de los órganos. La radiografía puede ayudar al médico a encontrar la causa de los problemas que se están produciendo.
Las radiografías se pueden utilizar para diagnosticar una enfermedad, controlar la progresión de la misma, determinar un plan de tratamiento y ver el efecto de un plan de tratamiento.
Los médicos utilizan las radiografías para localizar objetos extraños dentro del cuerpo y para guiarlos en la colocación de huesos rotos.
Una radiografía del brazo puede ayudar a diagnosticar (encontrar):
Las radiografías del brazo se utilizan para determinar la causa de síntomas como dolor, sensibilidad, hinchazón o una deformidad del brazo.
Una radiografía del brazo puede detectar infecciones, quistes o tumores en el brazo.
Una radiografía del brazo puede detectar huesos rotos, ayudar a un médico a colocar el hueso roto y puede supervisar el proceso de tratamiento para determinar si el hueso está bien alineado y la rotura está cicatrizando correctamente.
Las radiografías del brazo se utilizan en la planificación prequirúrgica y se utilizan después de la cirugía para evaluar los resultados de la misma.