Más de tres mil millones de personas viven en las zonas rurales de los países de ingresos bajos y medios. A menudo, los hogares rurales tienen muchas necesidades energéticas insatisfechas, como la cocina, la iluminación, la calefacción, el transporte y las telecomunicaciones. El diseño de soluciones para satisfacer estas necesidades requiere una comprensión de los sistemas humanos, naturales y de ingeniería que impulsan la dinámica energética de las aldeas. Este artículo presenta los resultados de un novedoso estudio sobre el suministro y el uso de la energía durante un año en una aldea rural aislada de 770 habitantes en Malí. Los datos cuantitativos y las descripciones narrativas de este estudio describen el suministro y el uso de la energía en la aldea. El uso anual de energía en la aldea es de 6000 MJ cap-1 al año-1. Las necesidades energéticas domésticas representan el 93% del uso energético de la aldea. La madera es la principal fuente de energía y proporciona el 94% del suministro energético de la aldea. Aproximadamente el 98% de la madera se utiliza para el consumo doméstico. Los usos de la madera en el hogar son cocinar (52,2%), calentar agua (22,2%), calentar espacios (19,1%) y otras actividades (6,5%). Este documento también informa de las variaciones en el uso de la energía a lo largo de un año para una amplia gama de usos energéticos domésticos, artesanales, de transporte y públicos.