La terapia es un componente clave para tratar los problemas crónicos de ira. En lugar de suprimir su ira, el objetivo general de la terapia es ayudarle a trabajar con ella para que pueda tener una relación más sana y equilibrada con sus emociones.
Un profesional de la salud mental puede hacer recomendaciones terapéuticas específicas basadas tanto en la gravedad de su ira como en su(s) causa(s) subyacente(s). También puede beneficiarse de la terapia si la ira de un ser querido le está afectando a usted.
A continuación se describen algunas de las formas más eficaces de terapia utilizadas para tratar la ira.
Terapia cognitivo-conductual (TCC)
La TCC es una técnica de psicoterapia utilizada en una variedad de programas de tratamiento de la salud mental. Funciona ayudándole a reconocer qué es lo que desencadena su ira y a identificar cómo responde normalmente a dichos desencadenantes.
Después, con la ayuda de un terapeuta, aprende nuevas formas de responder a la ira. Este tipo de terapia también puede ser útil para tratar la ira causada por un trauma emocional.
Si tiene un ser querido con problemas de ira, la TCC también puede ayudarle a aprender a enfrentarse a este tipo de situaciones. En estos casos, su terapeuta le guiará a través de respuestas saludables a la ira de otra persona.
Su terapeuta le ayudará a identificar objetivos y resultados personales para que pueda cambiar gradualmente sus pensamientos y comportamientos – y mantener los cambios.
Terapia psicodinámica
Si siente que su ira se está apoderando de su vida y afectando a los demás a su alrededor, un terapeuta podría recomendarle una técnica llamada terapia psicodinámica.
Este tipo de terapia se centra más en la autorreflexión. Trabaja para revelar tus motivaciones inconscientes para aliviar la tensión interna.
También puede aprender a expresar la ira de forma que no afecte a sus amigos, familiares y compañeros de trabajo.
Terapia de grupo
La ira crónica puede afectar a su autoestima y hacerle sentir culpable y aislado. En estos casos, la terapia de grupo puede ayudar. Dirigidas por un profesional, estas sesiones permiten que los participantes se reúnan de forma regular, por ejemplo semanal o mensualmente.
La ventaja de la terapia de grupo es que probablemente se sentirá menos solo durante el tratamiento. También puede ser útil conocer las estrategias de afrontamiento de otras personas. Dependiendo de sus necesidades, algunos tipos de terapias de grupo se basan en la familia.
La terapia de grupo suele ser un complemento de otros tipos de terapia. Es probable que necesite ver a un terapeuta para sesiones individuales para obtener los mayores beneficios.
Terapia de juego
La terapia de juego es una forma de psicoterapia diseñada específicamente para niños pequeños. Durante estas sesiones, un terapeuta autorizado utilizará formas creativas de juego para ayudar a los niños a expresar sus sentimientos y pensamientos. El juego puede incluir el uso de marionetas, cajas de arena, arte, música y mucho más.
El objetivo de la terapia de juego es ayudar a los niños a aprender a hacer frente a los desafíos, al tiempo que aumenta la autoestima. Al considerar el tratamiento de la ira, la terapia de juego puede ayudar a los niños a manejar sus emociones de una manera más constructiva.