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En el primer estudio de cohorte retrospectivo del modelo de medicina funcional, los investigadores de Cleveland Clinic descubrieron que la medicina funcional se asociaba con mejoras en la calidad de vida relacionada con la salud. El estudio se ha publicado hoy en la revista Journal of the American Medical Association Network Open.
El estudio, de dos años de duración, examinó a 1.595 pacientes tratados en el Centro de Medicina Funcional de la Clínica Cleveland y a 5.657 pacientes atendidos en atención primaria en un centro de salud familiar, evaluando la calidad de vida relacionada con la salud mediante PROMIS®, un cuestionario validado por los NIH. El PROMIS proporciona una medida de la salud física y mental global de los pacientes que puede controlarse a lo largo del tiempo, midiendo factores como la fatiga, la función física, el dolor, los problemas gastrointestinales y el bienestar emocional.
El estudio investigó la asociación entre el modelo de atención de la medicina funcional y la calidad de vida relacionada con la salud comparando a los pacientes de medicina funcional con los pacientes atendidos en un entorno de atención primaria.
Los investigadores descubrieron que los pacientes atendidos por el Centro de Medicina Funcional mostraron mejoras beneficiosas y sostenibles en su salud física global del PROMIS. A los 6 meses, los pacientes atendidos por el Centro de Medicina Funcional mostraron mejoras significativamente mayores en la salud física global PROMIS en comparación con los atendidos en un entorno de atención primaria. Aproximadamente el 31% de los pacientes atendidos por el Centro de Medicina Funcional mejoraron sus puntuaciones de salud física global PROMIS en 5 puntos o más, lo que supone un cambio clínicamente significativo y un efecto notable en la vida diaria. El 22% de los pacientes de atención primaria mejoraron sus puntuaciones en 5 puntos o más. A los 12 meses, los pacientes atendidos por el Centro de Medicina Funcional mostraron una mejora similar a la observada a los 6 meses, pero ésta no fue significativa cuando se comparó con las mejoras observadas en los pacientes de atención primaria.
Para examinar esto más a fondo, los investigadores evaluaron los cambios continuos a lo largo del tiempo en la salud física global del PROMIS en un grupo más pequeño de pacientes atendidos por el Centro de Medicina Funcional tanto a los 6 como a los 12 meses y demostraron mejoras en la salud física global del PROMIS que fueron significativamente mayores en comparación con los pacientes atendidos en un entorno de atención primaria.
Los investigadores creen que las razones de las mejoras en la calidad de vida relacionada con la salud mostradas en los pacientes de medicina funcional incluyen diferencias en el propio modelo de medicina funcional, los tipos de pacientes que buscan la medicina funcional y la adherencia al tratamiento o la creencia en el modelo de atención. Se necesitan futuros estudios prospectivos para examinar el modelo de atención de la medicina funcional y los resultados a largo plazo.
Michelle Beidelschies, Ph.D.
«Este es el primer estudio de su tipo que evalúa el impacto del modelo de atención de la medicina funcional en la calidad de vida relacionada con la salud de los pacientes. En el pasado, las pruebas para apoyar el modelo han sido principalmente anecdóticas, publicadas como informes de casos o basadas en intervenciones específicas y dirigidas utilizadas como parte del enfoque de la medicina funcional, como los cambios nutricionales», dijo la doctora Michelle Beidelschies, directora de Investigación y Educación del Centro de Medicina Funcional de la Clínica Cleveland y autora principal del estudio. «Los profesionales de la medicina funcional han sugerido que sus pacientes mejoran con un enfoque de las enfermedades crónicas basado en los sistemas. Ahora, tienen pruebas de que su enfoque se asocia con una mejor calidad de vida».
Los pacientes atendidos en el centro de atención primaria tenían una media de ingresos más alta, una media de puntuaciones PROMIS más alta y una mayor prevalencia de la diabetes y la hipertensión.
La medicina funcional mira al cuerpo como un todo y se centra en las causas fundamentales de la enfermedad en lugar de un conjunto aislado de síntomas. Se basa en la evidencia de que los factores del estilo de vida -como la nutrición, el sueño, el ejercicio, los niveles de estrés, las relaciones y la genética- son los principales contribuyentes a las enfermedades crónicas.
En 2014, Cleveland Clinic se convirtió en el primer centro médico académico en abrir un Centro de Medicina Funcional. El Centro de Medicina Funcional de Cleveland Clinic requiere que todos los nuevos pacientes vean a un dietista registrado y a un entrenador de salud, además de un proveedor como parte de su visita inicial, que suele durar entre 60 y 75 minutos. Los pacientes también tienen la opción de reunirse con un terapeuta de salud mental como parte de cualquier visita.
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- Centro de Medicina Funcional Cleveland Clinic