El descubrimiento de Akkermansia muciniphila ha abierto nuevas vías para el uso de este abundante simbionte intestinal en productos terapéuticos de próxima generación, así como para dirigir la dinámica de la microbiota. Se sabe que A. muciniphila coloniza la capa mucosa del intestino humano, donde desencadena respuestas metabólicas e inmunitarias del huésped. A. muciniphila es especialmente eficaz para aumentar el grosor del moco y la función de barrera intestinal. Como resultado, los marcadores metabólicos del huésped mejoran. Se cree que el mecanismo de regulación del hospedador implica la composición de la membrana externa, incluidos los pili de tipo IV de A. muciniphila, que señalan directamente a los receptores inmunitarios del hospedador. Al mismo tiempo, la actividad metabólica de A. muciniphila conduce a la producción de ácidos grasos de cadena corta que son beneficiosos para el huésped y los miembros de la microbiota. Esto contribuye a la sintrofia huésped-microbiota y microbiota La actividad mucolítica y la producción de metabolitos hacen de A. muciniphila una especie clave en la capa de moco, estimulando las redes microbianas beneficiosas de la mucosa.
Este miembro bien estudiado de la microbiota se ha estudiado en tres aspectos que se describirán con más detalle en esta revisión: i) las características de A. muciniphila y la adaptación a la mucina, ii) su papel como especie clave en el microbioma de la mucosa, y iii) su papel en la salud del huésped.