Reservar el mejor contrato posible puede ser algo complicado para los jugadores de la NBA. Por un lado, la historia está llena de ejemplos de jugadores que pasaron sus mejores años ganando demasiado poco. Para los que hayan visto el documental The Last Dance de ESPN, Scottie Pippen es el ejemplo perfecto. Stephen Curry también pasó unos cuantos años con un acuerdo decididamente favorable al equipo, aunque finalmente cobró con su último contrato.
En el otro lado están los jugadores que aguantan para conseguir grandes contratos que nunca se materializan. Un gran ejemplo es el ya retirado Bonzi Wells. Wells dejó mucho dinero sobre la mesa cuando rechazó un acuerdo con su equipo de entonces, los Sacramento Kings. Aquí echamos un vistazo a su carrera y a la decisión que acabó costándole 30 millones de dólares.
El ascenso de Bonzi Wells en la NBA
Los Detroit Pistons reclutaron a Wells con la undécima elección del draft de la NBA de 1998, para luego intercambiarlo con los Portland Trail Blazers por una futura elección de primera ronda. El escolta/alero de 6’5″ sólo jugó siete partidos en su temporada de novato. Al año siguiente, sin embargo, asumió las funciones de suplente habitual, aportando 8,8 puntos y 2,8 rebotes en 17,6 minutos por partido.
Estos números aumentaron en los años siguientes, ya que Wells pasó la mayor parte del tiempo jugando minutos como titular. Wells pronto se hizo conocido por su fogosa personalidad, que lo metió en problemas ocasionales tanto dentro como fuera de la cancha. Poco después del inicio de la temporada 2003-2004, los Trail Blazers traspasaron a Wells a los Grizzlies a cambio de Wesley Person y una futura elección de primera ronda.
Regulado a un papel principalmente de reserva, los números de Wells bajaron en Memphis. Los Sacramento Kings cambiaron a Wells antes del comienzo de la temporada 2005-2006. Jugando principalmente como titular, Wells tuvo un buen rendimiento, con 13,6 puntos y 7,7 rebotes por partido.
Fue especialmente productivo en los playoffs, cuando promedió 23,2 puntos y 12 rebotes en una serie perdida contra los San Antonio Spurs.
Los Kings hacen una oferta
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Los Kings quedaron lo suficientemente impresionados con el juego de Wells que, tras la temporada 2005-2006 le ofrecieron un contrato de cinco años por valor de 38,5 millones de dólares, según Complex. Es importante señalar que, en ese momento, los Kings eran una franquicia razonablemente exitosa. Llevaban siete temporadas consecutivas ganando, llegando a los playoffs todos los años.
Además, Wells era popular entre sus compañeros de equipo de los Kings, y en particular con Ron Artest. La pareja había formado uno de los tándems más formidables de la liga. Al parecer, Artest deseaba tanto que Wells se quedara que se ofreció a renunciar a su salario para la siguiente temporada.
Sin embargo, un Wells de 29 años aparentemente se valoraba más que los Kings y rechazó su oferta.
La carrera de Bonzi Wells se apaga
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Wells apostaba por la esperanza de atraer una oferta aún más lucrativa en el mercado libre. Desgraciadamente, esa oferta no llegó. En su lugar, Wells firmó un contrato de un año por un escaso valor de 2 millones de dólares con los Houston Rockets. Las lesiones, los misteriosos problemas personales y las fricciones con el entrenador Jeff Van Gundy limitaron a Wells a sólo 28 partidos con los Rockets.
Wells volvió a los Rockets la temporada siguiente, pero estaba claro que ya no era capaz de jugar a su antiguo nivel. La falta de acondicionamiento y la escasa ética de trabajo tuvieron mucho que ver. A mitad de la temporada, los Rockets traspasaron a Wells a los Hornets de Nueva Orleans, que no le renovaron el contrato a final de año.
Aunque él no lo sabía en ese momento, y a pesar de un par de intentos de remontada, ése iba a ser el final de la carrera de Wells en la NBA. En lugar de los 38,5 millones de dólares que podría haber tenido con los Kings, Wells sólo ganó unos 4,4 millones en sus dos últimos años. En otras palabras, su decisión de no volver a fichar por los Kings le costó finalmente más de 34 millones de dólares.